Los alquileres en la ciudad de Alcorcón son carísimos. La iniciativa privada ha provocado una burbuja que ha convertido la vivienda en un bien de lujo: a través de la iniciativa pública, podemos garantizar alquileres de 350€.
El problema de la vivienda ocupa horas y horas de debate y decenas de artículos. Los fondos buitre y la banca son propietarios de inmensos parques de vivienda, y controlan la oferta y la demanda a su voluntad para elevar los precios hasta que resultan insultantemente altos. La vivienda, que es un bien de primera necesidad, y que es un derecho constitucional, se ha convertido en un bien de lujo inaccesible para muchas personas.
Nuestros jóvenes no pueden emanciparse, y cuando lo hacen, tienen que compartir piso entre varios para poder permitirse el alquiler. Las nuevas familias tienen dificultades para conseguir viviendas adecuadas a sus necesidades, y eso les obliga a elegir entre tener un hijo y mantener una calidad de vida mínima. Familias que ya están formadas y asentadas ven como sus alquileres suben, y tienen que marcharse de la que ha sido su casa porque ya no pueden permitirse pagarla: son los denominados desahucios invisibles. Los desahucios visibles, por desgracia, ya los conocemos bien.
En una ciudad como Alcorcón, de gente trabajadora, la situación de la vivienda se ha vuelto insostenible. Los alquileres carísimos están expulsando a muchos vecinos. Los problemas asociados a la burbuja inmobiliaria los sufrimos de primera mano. Y mientras tanto, promotores, banqueros y especuladores se hacen millonarios, con la connivencia del Ayuntamiento.
El gobierno municipal debe proteger a los ciudadanos, debe garantizar que se cumplan sus derechos. Por eso, desde Ganar Alcorcón se comprometen a que la iniciativa pública afronte el problema de la vivienda con contundencia, con la construcción de 6.000 viviendas públicas que arrebatarán el control del mercado inmobiliario a los especuladores y permitirán ofrecer alquileres de 350€ con seguridad y garantías. Nuestros jóvenes, nuestras familias, nuestros mayores, como los afectados por el Plan Permuta, necesitan soluciones habitacionales: también en la vivienda, nuestra ciudad necesita un Alcorconazo.
